3.22.2011

Capitulo 34# de •○Forġotten children○•

11:45 a.m.

Es a la hora que usualmente Bill llegaba al periódico, y ese día no estaba allí. Yo misma había decidido salir en el descanso fuera del edificio para ver si encontraba algún rastro de él, y para mi mala suerte, no hubo ninguno.
No puse más que volver a la oficina, y a la hora de entrar, choque con alguien que ni la cara vi.
―Disculpa –dije seriamente.
―No importa –era una chica. La voltee a ver.
―Ah Mikaela, no vi que eras tú, en serio perdona –sonreí.
―Jennifer, ¡qué bueno que te encuentro!
―¿Me buscabas? –pregunte confundida.
―Sí, la jefa te busca, creo que te va a dar una muy buena noticia, a ver si la aceptas.
―Mm parece algo muy bueno.
―Y tu tranquila, yo le digo a Bill si aceptaste o no –sonrió.

¿Qué tenía que ver Bill? Solo salieron, no quiero pensar que son algo más. Bueno y si lo son, que bueno por él, claro que debió decirme.



―Creo que le puedo decir yo misma, es mi amigo, yo le digo.
―¿De cuándo acá es tu amigo?
―Desde que me di cuenta, que el vale más que su fama.
―Si dices, claro que tú como persona decías que eso no importaba.
―¿A ti quién te dijo?
―El mismo Bill.
―¡Guau! Que amigo, no te preocupes por mí ¿sí? Yo hare lo que sea con esa noticia, y si le dices o no a Bill es tu problema, claro que mejor para ti si vuelves a hablar con él, digo porque se nota que te ‘agrada’.
―Claro que me agrada, es Bill Kaulitz. Y la verdad si fuera tú, yo no desaprovecharía a alguien como él.
―Yo sé mis razones ¿de acuerdo? Ahora si me disculpas, tengo que irme.

Pase por delante de ella, y me dirigí a la oficina de mi jefa. Al llegar solo toque la puerta, escuche que dijeron ‘―adelante―‘ y entre caudalosamente.

―¿Quería verme? –pregunte.
―Sí, toma asiento Jennifer –me dijo sonriendo. Y me senté.
―Y ¿qué paso? Mikaela me dijo que era algo bueno.
―Lo es, y por eso pienso que tú eres la indicada para esto.
―¿Y qué es? –sonreí.
―Tenemos una bacante para un viaje de dos mes, donde irán varios editores del periódico, y los viáticos ya hasta están listos, solo sería cuestión de que aceptaras y fueras.
―¿Y adonde es ese viaje?
―A Estados Unidos, allá es una buena plataforma para periodistas, y es una gran oportunidad, no te queremos dejar allá porque solo es un viaje. Quiero ver como haces tu trabajo fuera del área de la que estas acostumbrada.

¿Estados Unidos? Al ir allá simplemente me desconcentraría más de lo que ya estaba respecto a lo personal. Y más sabiendo que estaría lejos de Alemania por un buen tiempo, no podría.

―No puedo –baje la mirada.
―¿Disculpa?
―Simplemente no puedo, no creo poder hacerlo.
―Jennifer, si te lo propuse es porque creo que lo puedes hacer, malo o no es una gran oportunidad. Y las oportunidades no vienen siempre, algunas son especiales, y esta te podría abrir un buen camino dentro de este ámbito de trabajo. Al menos piénsalo.
―¿Cuándo es el viaje?
―Sería el 3 de abril, cuando el vuelo saliera.
―¿Puedo confirmar mañana?
―Sí claro –suspiro―. Piénsalo bien, es lo único que te pido.
―Por supuesto –sonreí― bueno, volveré al trabajo –me pare.
―Claro.

Salí de la oficina y me dirigí a la mía.

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